El refrigerador es un gran invento que ayuda a mantener los alimentos frescos y evitar que se echen a perder rápido. Sin embargo, si no se limpia y organiza bien, puede convertirse en un hogar para bacterias peligrosas que causan enfermedades. Muchas veces, ni siquiera nos damos cuenta de que algo está contaminado hasta que nos enfermamos. Por eso, es importante conocer los peligros y cómo evitarlos.
Bacterias escondidas en tu nevera
Dentro del refrigerador pueden vivir bacterias como Salmonella, Listeria y E. coli. Estas pueden aparecer cuando los alimentos no se almacenan correctamente o cuando algo ya está vencido y lo seguimos comiendo.
- La Salmonella está en carnes crudas, huevos y productos lácteos. Si no guardas estos alimentos bien cerrados o si los comes crudos, puedes enfermarte con diarrea, fiebre y vómitos.
- La Listeria es muy peligrosa porque puede crecer incluso en temperaturas frías. Se encuentra en quesos blandos, embutidos y productos lácteos no pasteurizados. Puede causar fiebre y dolores musculares, y en casos graves, afectar el cerebro.
- La E. coli está en carnes crudas y vegetales contaminados. Si comes algo infectado, podrías sufrir diarrea fuerte e incluso problemas en los riñones.
¡No te chupes los dedos!
Muchas veces comemos sin lavarnos las manos después de tocar cosas sucias. Chuparse los dedos puede hacer que bacterias entren a nuestro cuerpo y nos enfermen.
Algunas enfermedades que pueden transmitirse por no lavarse las manos son:
- Hepatitis A, que afecta el hígado y causa fiebre, cansancio y piel amarillenta.
- Shigelosis, una bacteria que causa diarrea con sangre y calambres estomacales.
- Gastroenteritis viral, que provoca vómitos y fiebre.
Si tocas superficies sucias o alimentos contaminados y luego te llevas las manos a la boca, estas enfermedades pueden entrar a tu cuerpo.
¡Alimentos que pueden enfermarte!
Algunos alimentos se contaminan fácilmente si no se almacenan bien. Entre ellos están:
- Carnes crudas: pueden tener bacterias peligrosas si no se refrigeran bien.
- Leche y quesos: si no son pasteurizados, pueden contener Listeria.
- Verduras y frutas: si no las lavas bien, pueden tener microbios dañinos.
Consejos para evitar enfermedades
- Lava tus manos siempre antes y después de comer o cocinar.
- Guarda los alimentos correctamente, separando los crudos de los cocidos.
- Limpia tu refrigerador cada semana para evitar la acumulación de bacterias.
- No comas comida vencida, aunque parezca estar en buen estado.
- Cocina bien las carnes para eliminar bacterias peligrosas.
Dato extra: Esta bacteria puede sobrevivir en superficies como mesas y utensilios hasta por varias horas, por eso es clave lavarse bien las manos y desinfectar la cocina.